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Abuela cubana agradece el apoyo recibido para llevar a su nieta a Estados Unidos
La niña perdió a su madre a causa de una enfermedad y su padre se encuentra en la cárcel
La abuela cubana Gina Sao ofreció un emotivo agradecimiento en redes sociales a todas las personas que estuvieron al pendiente de ella, cuando se plantó en el Aeropuerto Internacional ‘José Martí’ de La Habana como protesta para trasladar a su nieta, de 11 años, a Estados Unidos.
La menor se encontraba en una situación de desamparo, debido a que su madre falleció a causa de un cáncer y su padre se encuentra privado de la libertad en una cárcel del régimen.
“Hoy quiero dar gracias a Dios y a todas las maravillosas y valientes personas, que hicieron posible que hoy mi nieta puede estar en libertad junto a mí en este gran país”, expresó en Facebook.
Gina dedicó sus palabras a activistas como Diasniurka Salcedo Verdecia, Suri Abreu, y su hermana Bárbara Ulabarro, agradeciéndoles por su inquebrantable apoyo y ayuda durante los momentos de angustia en la terminal aérea.
“A Dody paz, al doctor Alexander Jesús Figueredo Izaguirre, a ADN Cuba, a Esteban Rodríguez y a todos los que compartieron y siguieron mi caso. Un abrazo y muchas bendiciones para todos”, añadió la mujer de la tercera edad.
Pese a que el padre firmó un poder notarial para que la niña pudiera viajar con la abuela materna, las autoridades comunistas mantuvieron retenida a la menor hasta que por fin otorgaron el permiso para el traslado.
La abuela no permaneció en silencio, sino que en medio de su protesta lanzó fuertes palabras al gobierno cubano. “Dejaron morir a mi hija y no me van a dejar a mi nieta desamparada. Abajo la dictadura asesina. Díaz-Canel, sing**. Cuba es un Estado fallido”, manifestó.
Sao, residente legal en EEUU, también dijo en su denuncia: “estamos prácticamente desamparadas y no he podido conseguir llevarme a la niña porque necesito obtener la custodia. Es un trámite complejo y demorado por razones que desconozco”.
Además de implorar la ayuda del senador cubanoamericano Marco Rubio, la abuela también mencionó: “voy a estar plantada aquí en el aeropuerto. Mi nieta no tiene a más nadie. Soy la única familia que ella tiene y esta gente no me quiere dejar salir porque no le da la gana. Hasta cuándo es el abuso aquí”.
La historia de Gina Sao y su nieta resalta las complejidades y desafíos que enfrentan los cubanos, tanto en la Isla como en la diáspora, cuando se enfrentan a un sistema burocrático y opresor.