MUNDO
Prohíben construir un McDonald’s cerca de un área arqueológica en Italia
“Las maravillas de Roma deben ser protegidas” expresó la alcaldesa de la capital italiana, Virginia Raggi
El Ministerio de los Bienes y Actividades Culturales de Italia (MiBAC) vetó, este 31 de julio, un proyecto para abrir un nuevo local de McDonald’s en el corazón de la zona histórica de Roma.
“El Ministerio intervino rápidamente para anular, en régimen de autoprotección, el procedimiento de autorización para la construcción de un restaurante de comida rápida en el área arqueológica de las Termas de Caracalla”, dice un comunicado del ministerio, publicado hoy mismo.
“Ya antes había expresado mi oposición a un ‘fast food’ en la zona”, señaló el jefe del MiBAC, Alberto Bonisoli, en su página de Facebook, al comentar la decisión.
Avevo già espresso la mia contrarietà ad un fast food nell'area archeologica delle Terme di #Caracalla, vi informo che il Mibac ha provveduto ad annullare l'autorizzazione
Posted by Alberto Bonisoli on Wednesday, July 31, 2019
La alcaldesa de la capital italiana, Virginia Raggi, aplaudió esa denegación.
“Adelante con MiBAC… Las maravillas de Roma deben ser protegidas”, se expresó a través de su cuenta de Twitter.
Avanti con @_MiBAC per stop costruzione fast food nell'area archeologica delle Terme di Caracalla. Le meraviglie di Roma vanno tutelate.
— Virginia Raggi (@virginiaraggi) July 31, 2019
Según se planificaba en el rechazado proyecto, el restaurante, de 250 asientos, debía ocupar 800 metros cuadrados en un terreno privado en la vía Bacelli, muy próxima a las Termas de Caracalla y la muralla Aureliana.
“Es una de las pocas zonas del centro de Roma todavía sanas, no distorsionadas”, dijo el 25 de julio a La Repubblica el concejal municipal Stefano Marin.
“No se piensa en el impacto de viabilidad que un McDonald’s tendría en un lugar atravesado por una arteria tan concurrida como el Colombo”, aseveró el funcionario.
Las Termas de Caracalla son un complejo de baños públicos construidos a inicios del siglo III. Destruidos por un terremoto en el año 847, fueron excavados y reconstruidos en los siglos XIX y XX, convirtiéndose en una de las principales atracciones turísticas de Roma.
