Jóvenes cubanos podrán acceder a la universidad sin presentarse a los exámenes

El rigor para acceder a la Enseñanza Superior en Cuba cada vez es menor: para optar por una carrera este año no será necesario presentarse a los exámenes de ingreso. (Foto: Periódico Cubano)

Ni la educación puede decirse a estas alturas que es un «logro de la revolución». A la falta de docentes, las malas condiciones de las instalaciones, entre muchas otras dificultades arrastradas por años, se suma la falta de rigor para acceder a la enseñanza universitaria.

René Sánchez Díaz, director de Ingreso y Ubicación Laboral del Ministerio de Educación Superior (MES), informó que todos aquellos que hayan concluido el preuniversitario podrán pasar al siguiente nivel, hayan aprobado o no los exámenes de ingreso.

Los resultados de estas pruebas solo se tendrán en cuenta para el orden en el otorgamiento de las carreras. Para el próximo curso, que comienza el 18 de abril, se dispone de 100.022 plazas, más de 9.000 en comparación con 2021.

Para la asignación de las especialidades y los programas de formación de Nivel de Educación Superior de Ciclo Corto se tendrán en cuenta; en primer lugar, los aspirantes aprobados con un mínimo de 60 puntos y luego quienes suspendieron. Después, se concederán a los que no se presentaron a las pruebas.

El directivo también señaló que se ubicarán los egresados de la Enseñanza Técnica y Profesional, de la Facultad Obrero Campesina, de preuniversitario de cursos anteriores, así como otros valorados por la Comisión de Ingreso Provincial.

¿Por qué el MES adoptó esta medida? Cuba necesita más hombres y mujeres que trabajen la tierra, o ejerzan otras profesiones imprescindibles no universitarias. Eso lo saben todos e incluso ha sido analizado en las “altas esferas”. Sin embargo, las concesiones en el acceso a la universidad pueden estar relacionados con el éxodo masivo que sufre la Isla. Los jóvenes huyen de su país por todas las vías posibles.

No obstante, son muchos los riesgos que enfrenta la sociedad al tomar decisiones tan desesperadas como esta. A menos que luego, en las aulas universitarias, se apliquen evaluaciones de rigor, la mayor de las Antillas graduará profesionales no competentes, con poco o nada de compromiso hacia el trabajo que realizan. En cualquier variante, la maquinaria de la dictadura se encargará de robarles la motivación y los deseos de hacer.

El próximo curso escolar tendrá una duración de 35 semanas, es decir, nueve menos que un curso ordinario. La convocatoria para los exámenes de ingreso a la Educación Superior está prevista de la siguiente manera: Matemática (1 de marzo), Español (4 de marzo) e Historia (8 de marzo). La especial, para casos justificados, será los días 4, 6 y 8 de abril.