Historia del bebé abandonado en Holguín: “La secta no admitía hijos varones”

El bebé abandonado en el Holguín presenta buen estado de salud. (Foto: Captura de video-Canal Caribe)

El bebé abandonado en Holguín y su hermano entregado, ambos en custodia de “unos familiares de Las Tunas” son víctimas de una historia de violencia de género, abandono institucional y fanatismo de una secta. Nuevos detalles sobre el caso revelan que la organización religiosa no admitía hijos varones.

Ante los ojos de la comunidad y las autoridades ocurrieron los hechos. Todos sabían que las dos niñas que vivían en esa casa eran golpeadas, que a la mujer no se le permitía salir y ya había sufrido otro parto intradomiciliario.

Aunque la prensa oficialista ha dado seguimiento al estado de salud de los menores involucrados, se ha quedado solo en el “fanatismo” de los padres. En pocos segundo un reportaje del Canal Caribe menciona que “deficiencias en cuanto al trabajo social, comunitario y de atención a menores. Con una acción oportuna e integradora hubiera podido evitarse este lamentable suceso”.

La abuela materna del bebé y el presunto padre permanecen bajo custodia e investigación policial. Yordanis Vázquez, quien se hacía llamara El Mesías, en nombre de la fe logró reunir numerosos seguidores que hoy denuncian los abusos del hombre dentro de la casa ubicada en el reparto Alcides Pino.

Una historia de violencia de género

La historia del bebé abandonado también muestra la necesidad de una Ley Integral contra la Violencia de Género. Varios colectivos feministas se han unido a través de un comunicado en la plataforma YoSíTeCreo en Cuba para demandar a las autoridades pertinentes se apruebe la normativa.

“Sucedió frente a la vista de numerosas instituciones y organizaciones barriales, que tienen en su misión velar por la seguridad ciudadana y los derechos de las mujeres. Incluso pudiera ser que el supuesto agresor de Holguín tenga una sanción previa por realizar partos clandestinos”, cuestionó YoSíTeCreo en sus redes sociales.

El tratamiento que las autoridades cubanas dan a las violencias de género es fragmentado, limitado y puntual, afirmó la plataforma. “Además de estar desactualizado y no establecer sinergias con actores sociales claves. Persiste en la violencia de Estado e institucional con sesgo de género”.

Asimismo, denunció que hasta la fecha los protocolos para prevenir la violencia hacia las mujeres y sus hijos no son efectivos. Tampoco existe transparencia por parte del gobierno en las estadísticas sobre feminicidios.

“Los feminicidios y las afectaciones de diverso tipo a personas adultas, y sobre todo niñes, de las violencias de género, pueden ser reducidas si comenzamos a trabajar ya de forma integral y sin discriminaciones por razones políticas por lo que es verdaderamente importante: los derechos de todas las personas”.